«Según informa el Gobierno, todas estas decisiones suponen la adopción de un calendario de reformas estructurales para las próximas semanas que también incluirán privatizaciones y reformas en distintos ámbitos orientadas a la racionalización de los costes y la mejora de competitividad y la flexibilidad de la economía española, como en el sector energético, la unidad de mercado, el mercado de alquiler, el fomento de la actividad emprendedora o las actuaciones en I+D+i». MADRID, 9 Abr. (EUROPA PRESS)
Este es un párrafo que hace referencia a la competitividad, que dentro de un conjunto de medidas se ha repetido más o menos de la misma manera en todos los medios, recoge las actuaciones que tiene previsto acometer el Gobierno de España para asegurarse por todos los medios, que cumpliremos nuestras promesas y pagaremos nuestras deudas.
La cuestión es que para hacer frente a los pagos de la deuda, de los intereses y poder estar así en condiciones de poder emitir la necesaria para poder financiar nuestros gastos a un coste soportable, la única posibilidad va por la reducción de los costos, es decir de las medidas traumáticas, porque a los mercados, es decir a nuestros acreedores, no les bastan las intenciones y ni siquiera las medidas si estas no tienen efectos inmediatos.
Resulta difícil creerse que un bosque quemado se recupere para la primavera, pues así pasa con la economía.
Tenemos un déficit tarifario enorme, consecuencia de que durante 10 años el Gobierno ha permitido a las eléctricas que nos cobrara menos de lo que les cuesta producir y hacernos llegar la electricidad. Se suponía que iban a venir años en los que la economía española y nuestras empresas iban a estar tan bien que podrían cobrarnos más y así resolver el problema. Este «paternalismo» ha permitido que mucha empresas españolas se hayan adaptado a trabajar a un coste inferior al real. Las que hayan sobrevivido a la crisis tendrán que soportar un incremento importante en su coste eléctrico para ajustarse a la realidad.
La llamada unidad de mercado que es preciso recuperar según el Gobierno de España, tiene que ver con el sobrecoste que les supone a los empresarios que operan en España, el tener que estudiar normativas diferentes dentro de nuestro país para adaptarse a los condicionantes técnicos y procedimientos, a veces también concursales de Ayuntamientos , Delegaciones del Gobierno, Comunidades Autónomas……..
Sin entrar en la cuestión de las lenguas, resultan evidente las duplicidades, triplicidades,…..que son corrientes en aspectos urbanísticos, comerciales, técnicos……y que tampoco van a resolver los procesos automatizados, o ventanillas únicas……que hacen más rápido lo que en sí mismo son procesos mal diseñados, que incorporan una cantidad enorme de tareas superfluas y por tanto de costes superfluos.
Esta línea de actuación que ha permitido inflar de personal las administraciones locales y autonómicas en los últimos 10 años, va a ser difícil que pueda tener resultados en términos de eficiencia en pocos meses. No sólo porque puede afectar a muchos funcionarios, sino que además, antes de abandonar las normativas y los procedimientos actuales hay que redefinir e implantar los nuevos, que tal vez serán muy parecidos a los de hace 10 años, pero que hoy por hoy ya no existen.
Las actuaciones en I+D+i son la esencia de la competitividad de un país. La Investigación crea ventajas diferenciales en productos más allá que la del precio y permite por tanto crear y mantener empleos de nivel. Creo que empujar en esta línea es importantísimo para España, pero hay que poner al frente de quienes deciden qué proyectos subvencionar y con qué intensidad hacerlo, a personas competentes, poco dados a dejarse impresionar por arriesgadas ideas incluso para el dinero público y neutras políticamente. Esta es una actividad que en España ha venido realizando muy bien el CDTI, pero sus presupuestos para este año se han mermado notablemente, así que habrá que ver en qué acciones concretas se reflejan las intenciones del Gobierno en este ámbito y cómo llegan estas medidas a las Comunidades Autónomas.
Cuando el párrafo comenta el objetivo de flexibilizar la economía española, creo que se refiere a poner en variables, los costes fijos o estructurales tal y como se entiende por flexibilidad en el mundo empresarial.
Aquí nos encontramos de nuevo con los elevados costes de funcionamiento de las Administraciones y por tanto, pasar a variable lo que son los costes fijos, tiene que venir por la vía de acomodar costes a los ingresos, lo que afectará tanto a los funcionarios como a los contribuyentes.
Va a ser difícil hacer entender a los ciudadanos que otra vez los salarios tal y como se estructuran actualmente, no responden ni a la creación de valor de las empresas públicas ni a la calidad de los servicios en la administración.
Si queremos tener cirujanos de corazón dentro de la Sanidad Pública, tendremos que pagarles lo mismo que en otros países y en otras empresas, si no se irán y de los que se queden tendremos dudas de si son los mejores. Este problema no es el mismo para el personal de limpieza, en el que resulta obviamente más fácil encontrar mano de obra dispuesta a realizar ese trabajo. Las relaciones entre niveles profesionales en la Administración van a tener que revisarse mucho si se quieren tener los mejores profesionales en determinadas especialidades técnicas y directivas, al mismo tiempo que la revisión de los procesos administrativos tienen que liberar de los costes tareas supérfluas.

Español: Imagen del Ministerio de Economía y Hacienda de España Tomado de la web del Ministerio de Economía y Hacienda acorde con el aviso legal: Se autoriza la reproducción total o parcial de los contenidos del Portal, siempre que se cite expresamente su origen. English: Logo of Ministry of Economy (Spain) (Photo credit: Wikipedia)
No entraré mucho en el mercado de alquiler que al parecer se pretende potenciar. Es lógico que hoy tanto el precio como el alquiler de la vivienda es desproporcionado en relación con los salarios y con el nivel de paro que tenemos. No creo que sea una buena medida que paguen justos por pecadores, ya que si Cajas, Bancos y Constructoras han sido los responsables del desajuste, junto con las entidades supervisoras y los gobiernos que no lo han evitado, sus dirigentes deberían dar cuentas de sus decisiones antes de endosar más impuestos a los ciudadanos con propiedades que ya pagaron sus impuestos y tal vez estén pagando todavía sus hipotecas.
Dejo para el final el fomento a la actividad emprendedora. Cada vez que sale este asunto en alguna conversación, me acuerdo del Karrikiri o del Lince Ibérico.
Así como a principio del siglo XX se forjó una generación de grandes empresarios, en España hemos vivido y se nos ha educado desde los 80 en un entorno que ha adormecido esa característica innata de ciertas personas que destacan por la disposición a asumir riesgos económicos importantes, para acometer proyectos que hagan realidad sus sueños, sus ideas,…. que en términos vitales van más alla de recuperar el dinero apostado y obtener una rentabilidad. Esta especie de humanos casi en extinción, lleva en su ADN esa actitud que admiramos en los deportistas de élite pero que ellos llevan a su vida laboral a su proyecto vital y que es capaz de influir en su entorno e integrar a otros personas.
Todos recordamos casos de empresarios corruptos, explotadores, prepotentes, imprudentes……sin más interés que el de acumular beneficios, a cualquier costa, pero junto a éstos y en mayor número están los que se han jugado su patrimonio por una idea, por sus empleados, en definitiva por su obra vital.
Deberíamos pensar que sólo una pequeña fracción de las empresas que se crean sobreviven, y por tanto distinguir el error del delito, y que una empresa puede fracasar siendo honrado el empresario, pero esto no lo asumiremos hasta que asumamos también que el trabajo, el empleo, tampoco es para siempre. Los riesgos de empresarios y trabajadores, aunque de intensidades diferentes, tienen la misma raíz porque el mercado es el mismo para todos.
Va a ser difícil también que una sociedad acomodada como la nuestra asuma riesgos, pero es algo que tenemos que promover en España junto con la responsabilidad y la prudencia porque si nó, lo mismo que nuestros mejores científicos y técnicos, nuestros emprendedores se irán allí dónde encuentren más oportunidades.
Volviendo al tema del post, las medidas del Gobierno, hoy por hoy creo que las medidas son necesarias pero nuestra prima de riesgo seguirá durante mucho tiempo alta o muy alta porque aunque reconocen los esfuerzos que suponen nuestros acreedores no se fían de que consigamos superar a corto las dificultades.
En momentos como éste es necesario apelar al sentido de nación, al patriotismo y al sentido de responsabilidad de todos y cada uno. Estas palabras que suenan tan raras en nuestro pais, son las a Japón le están sirviendo para salir de una crisis y de un tsunami. Solo una acción conjunta y asumida por todos en la misma proporción, podría dar una respuesta rotunda a quienes nos vigilan económicamente.
Si somos un 30 % más pobres de lo que nos creíamos ¿Por qué no lo reconocemos todos a la vez?
Si hay que bajar los sueldos un 30 % ¿Por qué no a todos?. En ese orden deberían bajar también los precios de los pisos, los alquileres, el pan, la caña, el cine, los restaurantes, los productos y los servicios, los impuestos, los tipos, las hipotecas………¡TODO!. Pero todo a la vez y con la seguridad de que nadie saliese beneficiado a excepción de nuestras exportaciones.
Sería una devaluación voluntaria y general, un cambio de escala, una revolución económica interna y una lección al mundo de que juntos podemos………¿ Qué te parece ? ¿ Lo apoyarías?
EDM
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