De manera espontánea y como sí se tratara de un milagro colectivo, oficinas bancarias, comisarías y juzgados reciben ingresos a favor de cuentas públicas de múltiples personas que quieren mantenerse en el anonimato.
Se trata, según dicen fuentes dignas de todo crédito, del deseo de todos aquellos que sustrajeron indebidamente fondos públicos de ponerse en paz con la sociedad.
Miembros de partidos políticos, sindicatos, de gobiernos autonómicos y del nacional, directivos y ex directivos de Cajas de Ahorros, beneficiarios de subvenciones han sido según las mismas fuentes los principales protagonistas de este acto de reparación
Desde el Ministerio de Hacienda, en un primer recuento se confirma que de mantenerse la tendencia de lo recaudado, al terminar el día podría equilibrarse el déficit nacional, amortizar la deuda e incluso reducir los impuestos en el próximo año.
Saludos
Deja tu comentario